Ya tenía preparada mi sección para hoy, cuando el Martes por la mañana me llega por WhatsApp una enlace a una publicación de Facebook. Dichosas redes sociales que tanto amargan a los poderosos. El día que las entiendan, sonarán las campanas.

Y ya que mencionaba la situación en mi colaboración de esa semana, decidí que Luis Gerardo merecía que le dieran voz. Le pedí permiso para hacerlo y, así, hemos llegado hasta aquí. Porque aparta de hablar bien claro en la bolera, también merece ser escuchado fuera de ella.  Creo que a nadie se le escapa que hacer 8º en un Campeonato de España no está al alcance de cualquiera.

Y lograr ese puesto cuando además de rivales en la bolera, tienes adversarios fuera de ella, tiene un mayor mérito. Y si a alguien le molesta que preste mi voz para que se escuche la de Luis Gerardo, dos problemas tiene. Yo no me voy a callar. Así que no os aburro más, es hora de que hable Luis Gerardo:

Fotos: Sergio Iturbe

Luis Gerardo Saiz Campeonato de españa de bolos 2022
Foto de Sergio Iturbe

Mi primer Campeonato de España de Primera Categoría

Contexto:

Este año, esta temporada 2022, se planteaba difícil para mi: me mudaba a una ciudad con un estilo de vida completamente diferente al que llevaba hasta entonces, con nuevos amigos, nuevos retos, nuevas experiencias… lo cual implicaba alejarme en parte de mi vida aquí, mis amigos, mi familia, mi deporte, mi peña.

La parte psicológica en los bolos es fundamental y sabía que dichas alteraciones me iban a afectar a nivel deportivo, no sabía ni cómo ni cuándo. También sabía que no iba a entrenar ni a tener el ritmo de competición que llevaba hasta ahora. Pero la vida es así, lo acepté y trabajé adaptándome a ello. Cambié mi estilo de juego, necesitaba más tiempo de concentración y me despreocupé de perfeccionar la técnica, el poco tiempo que he tenido para prepararme, ha sido centrado en sumar bolos, en fallar poco y en ser resolutivo.

Empecé la temporada con unas sensaciones raras en el cuadrangular por equipos que organizaron en marzo en Madrid, quizás por enfrentarme a la que siempre será mi Peña Mali. Seguí con mejores sensaciones en el amistoso contra Andros La Serna Valle de Iguña en mayo.

En mi primera competición importante del año, el San Isidro, estaba muy motivado. La Peña Bolística Madrileña me había acogido en su ‘familia’ y me esforcé por hacer una participación digna, con la suerte de que el resultado fue sorprendente para mi. Un quinto puesto y un concurso de 140 que no me imaginaba ni en el mejor escenario posible, después de la muerte de mi abuela el fin de semana anterior. No sé si fue motivador a nivel deportivo pero si sé que fue desolador a nivel personal, sea lo que sea, gracias güelita.

El fin de semana siguiente disputaba el Campeonato Regional por Parejas de Madrid y el Campeonato Regional Individual, quedando primero(junto a Javier del Rivero) y segundo respectivamente. Posiciones que me daban acceso a los Campeonatos de España correspondientes. Fue un finde intenso y agotador, mucha competición para poco entrenamiento y me di cuenta de que el resto de temporada sería duro, no me imaginaba cuánto ni por qué. Dos concursos de 107 en Roiz y 95 en Noriega lo corroboraron.

Campeonato:

Unos meses después llegó el Campeonato de España Individual, mi primera participación. Estaba nervioso y con ganas de hacerlo bien, resultara bien o mal quería acabar con buen sabor de boca. El martes 23 a las 16:30 empieza mi concurso y sorprendentemente para mi, me empezaban a salir las cosas bien y con muy buenas sensaciones. A pesar de fallar acabé con 128 y una alegría inmensa. Después del primer día de tiradas acabo cuarto y opto a pasar de fase.

Foto de Sergio Iturbe

Pero a las 22:05 recibo una llamada de un miembro de la Peña Madrileña diciendo que están estudiando descalificarme porque incumplo una norma. Con los nervios y la tensión del momento, busco dicha norma y sin tiempo de reacción, a las 22:11 recibo una segunda llamada y me pasan con un miembro de la Federación Española de Bolos. Este miembro me comunica por teléfono que voy a ser descalificado del campeonato y que el miércoles 24 por la mañana iba a salir una circular anunciando mi descalificación. Al acabar la llamada empiezo a buscar todos los reglamentos de la Federación Española de Bolos, la norma y demás material necesario. Dicha norma sale en la Circular 4905bis, la cual dice en el apartado Segundo. Participación en Campeonatos de España:

“Un jugador que haya participado en la Fase Clasificatoria para un Campeonato de España por una Federación Autonómica, no podrá dentro de la temporada disputar otra Fase Clasificatoria para ese mismo Campeonato por una Federación Autonómica distinta de la inicial.”

Seguido busqué qué es una temporada para la F.E.B. y encontré en el Reglamento de Partidos y Competiciones Bolo-Palma lo siguiente:

“Artículo 1) La temporada oficial de juego, queda comprendida dentro del año natural, comenzando el 1º de Enero, y finalizando el 31 de Diciembre, periodo de validez de las licencias.”

Este artículo deja bien claro que si yo he participado en el CINA-1 del 2021 por la Federación Cántabra de Bolos y en el Campeonato Regional de Madrid en el año 2022, son dos temporadas diferentes para la F.E.B., así que entendí que no incumplía la regla anterior.

Además, por si acaso, busqué en el Reglamento de Disciplina Deportiva de la F.E.B., el cual explica que hay 15 días para recurrir resoluciones sancionadoras, aunque entendí que, en caso de que ellos tuvieran razón, el fallo es suyo y no mío, por lo que no me podrían sancionar más allá de la descalificación. También pensé que, en caso de que saliera la circular que me dijeron, lo correcto sería ir a jugar el jueves porque, al aparecer convocado en sus circulares, al no ir podría incumplir los artículos 46 y 93 del Reglamento General de la F.E.B. que obligan a un deportista federado a acudir a las Competiciones oficiales si ha sido convocado, excusando su no asistencia con 7 días de antelación a la celebración de la competición, lo cual era imposible.

El miércoles por la mañana no salió tal circular y nadie de la F.E.B. se volvió a poner en contacto conmigo, aún a día de hoy, para comunicarme que se han equivocado y tengo todo mi derecho a participar en el Campeonato.

Entre medias he escuchado muchas cosas que no tengo constancia de su veracidad, pero podrían concurrir en actuaciones antirreglamentarias como pasó en el Campeonato de España de 2ª Categoría del 2019 y que incumplieron el Artículo 73 del Reglamento General de la F.E.B. y casualmente, casualmente me perjudicaron, o los artículos 96 y 137 entre otros, del mismo reglamento que no tengo claro si se cumplen o no, aunque diría que en este campeonato no lo han hecho.

Con todo esto, el jueves 25 me presenté a jugar en la Severino Prieto y me salió un concurso de ensueño: 140 en mi primer Campeonato de España de Primera Categoría. Os podéis imaginar cómo estaba: la tensión de la competición, los nervios de las circunstancias a pesar de mi convicción de que no podían descalificarme. Ser la comidilla del campeonato no ayuda. Por eso creo que, como todas las normas se rigen por la Ley 10/1990 de la Ley del Deporte, y siendo un Campeonato de España al que se le considera una competición profesional, algunas personas de la F.E.B. han alterado mi desarrollo profesional del campeonato, dado que nadie más ha competido con mis circunstancias y en todo momento han sido fallos suyos.

Con todo, también pienso que si hubiera hecho 100 en el primer concurso, nadie hubiera dicho nada, pero parece que hay gente que le molesta que fuera de su bolera o fuera de Cantabria se juegue a los bolos a un cierto nivel, y más que venga alguien como yo a competir. Pero como se suele decir, que ladren y que sigan ladrando.

Foto de Sergio Iturbe

El viernes 26 no estuve fino y pinché. Esto se juntó con una excelente participación de mis adversarios, lo cual me hizo acabar con un octavo puesto en mi primer Campeonato de España de Primera Categoría. Pero aquí no acaba todo…

Un par de concursos después, hablé en persona con el miembro de la F.E.B. que me comunicó por teléfono mi posible descalificación y creo que nos entendimos. Creo que tuvo algún fallo como podemos tener todos, pero los que han removido todo no han sido capaces de dar la cara. Al igual que pienso como dije antes, que si mi participación hubiera sido mala nadie hubiera dicho nada, pienso que quien lo ha revuelto todo sabía de esta norma desde 2017, ya podrían haber reclamado en tiempo y forma cuando supieron que iba a acudir en representación de la Federación Madrileña de Bolos. Estoy convencido de que sabían que el espíritu de la norma era diferente a la redacción de la misma, esto me lo han explicado después, pero las normas no están para interpretarlas según convenga sino para que no den lugar a confusión. Quizás deberían dejar paso a gente que quiera trabajar por el bien de los bolos y no por su propio interés. Quizás deban entender que los bolos se están muriendo y deban mimar a la gente de “fuera” de Cantabria. Todos estamos en el mismo deporte, en el mismo mundillo y no os deberíais creer mejores ni más importantes que nadie, porque si no sois capaces de cuidar los bolos, que para eso estáis en las instituciones, esto se muere.

Claramente estoy generalizando y no pienso que toda la gente de la F.E.B. sean iguales. Pero sí que hay gente que sobra. Algún directivo ha podido hasta incurrir en alguna falta grave como el incumplimiento del artículo 2 del Código de Buen Gobierno de la F.E.B. que dice:

“b) abstenerse de intervenir en deliberaciones y votaciones de cualquier cuestión en la que pudieran tener un interés particular.”

Yo juego a esto porque me gusta, y soy lo suficientemente fuerte como para que sus amenazas no me amedrenten. Son unos cobardes por no dar la cara, ni para pedir disculpas si fuera necesario. Y por supuesto que su ética moral deja mucho que desear.

Que os quede claro que seguiremos aquí, practicando este deporte tan bonito con tan buena gente que lo compone, aunque les reviente que consigamos triunfos y siga intacta lo que más quieren arrebatarnos, la dignidad.

Por último quiero dar las gracias ante todo a mi familia que me ha acompañado en estas circunstancias tan duras, a la Peña Madrileña que me ha brindado un apoyo incondicional desde el primer momento que supieron que iba a competir en Madrid y a toda la gente que me ha mandado mensajes de ánimos y de felicitaciones aún sin conocerme. De verdad, muchas gracias.

Nos vemos por las boleras.

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